Los “guineos” son una variedad más pequeña del plátano verde. Siempre se le ha considerado de importante aporte nutricional, vitaminas, hierro, para ayudar a crecer y hasta se usa como papilla cuando los bebés inician el proceso de alimentos. Los guineos se cocinan y se comen simples, con mantequilla, en puré. Se añaden en sopas, se puede hacer ensaladas y muchas opciones en recetas, por su textura más suave que el plátano verde.
Para esta receta también puede usarse “bananos verdes” por su sabor más liviano, por la textura y suavidad. Requiere de 1 manita de guineos (12 unidades aprox), 1 cebolla, 1 chile dulce, 2 ajos, 1 cucharada de aceite, 1 lata de atún con vegetales (o a su gusto), 1 taza de maíz dulce, 1 cucharadita de achiote (colorante natural) sal y comino, tomillo, culantro y tortillas para acompañar.
Pele y cocine los guineos en agua con sal, ajos y tomillo, hasta quedar al dente (no muy suaves). Escurra, deje enfriar y pique en cuadros pequeños.
Aparte haga un sofrito con el aceite, cebolla, chile dulce, todo bien picado, añada el achiote y los guineos y el maíz dulce. Mezcle y condimente con comino y pizca de sal. Agregue el atún y mueva tan solo a integrar bien.
Corone con culantro picado y sirva en gallos con tortillas calientes, o bien servido con arroz blanco y una ensalada verde. Livianito y sano para iniciar el año nuevo.